top of page

Maldito cretino.

Ha tardado una hora en caer rendido. Lo he visto beberse una copa tras otra hasta acabar con la botella, ¿por qué a todos los imbéciles les da por lo mismo? Ojalá se lo lleve pronto una cirrosis y desaparezca de este mundo.

Parece que llegó el momento.


 

Me resulta patético ver cómo alguien se destroza la vida de forma tan absurda.

Pero que encima de llevar una patética vida de alcohólico, sea un delincuente sexual secuestrador de niñas... eso sí que no.

No bebo sangre humana, pero de vez en cuando hay que darse caprichos.



 


Hogar dulce hogar...

Su cara de pánico me encoge el corazón.

Su grito se silencia cuando me encuentra frente a ella.

Mientras estoy intentando explicar por qué es absurdo que intente huir, se tropieza con sus propios pies y sale volando.

Intercepto la caída antes de que su preciosa cara bese el asfalto, eso sí que no puedo permitirlo. Espero que empiece a patalear y oponga resistencia pero nada de eso sucede.

Genial, se ha desmayado. Lo que me faltaba. Dos cuerpos inertes en la entrada de casa, como venga Jadis, soy hombre muerto.


bottom of page